La zona cutánea local del dolor o del foco de afección tiene el nombre de zona de proyección directa de la «queja» del paciente. Como regla, una y otra «queja» está vinculada con algún órgano enfermo y órgano de función alterada. En la superficie de la piel del cuerpo existen zonas bioenergéticas que corresponden a diferentes órganos internos. Estas zonas deben ser sometidas a la influencia del aparato DENAS (DENS) con el fin de mejorar el estado del órgano correspondiente.
Ejemplos con video:LUMBAGO, RODILLAS, PULMONES, HIGADO, CUELLO.
Las zonas universales son las proyecciones de las zonas del cuerpo situadas en grandes estructuras nerviosas (médula espinal, ganglios vegetativos, nervio trigémino).
Electro-Neuro-Estimulación en las zonas de influencia universales es preferencial en los casos cuando es necesario obtener una acción segura y prolongada como: eliminar el estado de fatiga y aumentar la capacidad de trabajo, influir en las funciones del sistema nervioso central con el fin de normalizar el trabajo del sistema endocrino y alcanzar el balance entre los procesos de excitación y de inhibición. Además las zonas de influencia universales pueden ser utilizadas para tratar enfermedades variadas, traumas y estados patológicos.
La situación y distribución de las pequeñas raíces de los nervios, los entrelazamientos y nudos del sistema nervioso vegetativo están sometidas a la ley del metamerismo. La inervación y transmisión de la información desde un órgano interno hacia el sistema nervioso central y más allá hacia una parte de la piel (y al revés, de la piel hacia el órgano interno) se realiza por los mismos segmentos de la medula espinal, o formaciones vegetativas.
La influencia en una zona segmentada de la piel de determinada parte del cuerpo (dermatomeria) con la ayuda de impulsos del aparato produce alteraciones positivas funcionales en los órganos y tejidos pertenecientes a este segmento metámero de la piel expuesto a la influencia. Bajo esta influencia del aparato DENS se observan cambios de micro circulación, metabolismo en las células de tejidos y órganos, formación de sustancias biológicamente activas. Todo esto favorece la normalización de las funciones motrices, inmunes, secretorias, etc. de los órganos internos ligados metaméricamente con las zonas de la piel.
Se pueden clasificar como zonas periféricas las zonas de microsistema de similitud. Estas son las partes del cuerpo que reflejan la estructura anatómica del organismo en forma reducida. La enfermedad se refleja en la parte de la piel que corresponde al órgano o parte afectada del cuerpo, y la estimulación de ésta parte permite a su vez influir de manera rápida y positiva sobre el órgano enfermo. Estas zonas son: Palma de la mano y Planta del pie.
Esas partes pueden ser tratadas por medio de siguientes métodos:
El sistema Su-Jok corresponde a Sistema Complementaria midi.
La situación y distribución de raicitas de nervios de la médula espinal, entrelazamientos de nervios y nudos del sistema nervioso vegetativo se someten a la ley de metamerismo. La innervación y transmisión de la información desde un órgano interno hacia el sistema nervioso central y más allá hacia una parte de la piel (y al revés, de la piel hacia el órgano interno) se realiza por los mismos segmentos de la medula espinal, o formaciones vegetativas.
La influencia en una zona segmentada de la piel de determinada parte del cuerpo (dermatomeria) con la ayuda de impulsos del aparato produce alteraciones positivas funcionales en los órganos y tejidos pertenecientes a este segmento metámero de la piel expuesto a la influencia. Bajo esta influencia del aparato DENS se observan cambios de micro circulación, metabolismo en las células de tejidos y órganos, formación de sustancias biológicamente activas. Todo esto favorece la normalización de las funciones motrices, inmunes, secretorias, etc. de los órganos internos ligados metaméricamente con las zonas de la piel.
La acción curativa del aparato DENS en las zonas metámero-segmentadas se destaca por lo simple y efectiva, y por su argumentación científica desde el punto de vista de la neurofisiología moderna.
Son las zonas dolorosas de la piel localizadas en las fibras de los músculos esqueléticos en el interior de una banda tensa (endurecimiento, parestesia) palpable de las fibras musculares ó de su fascia. Pueden tener dimensiones y formas diversas y a menudo no coinciden con lugares de innervación de sensibilidad. Se llaman triger ó de gatillo por generar dolor reflejo a distancia del punto de presión.
Existen varios fenómenos en las zonas trigger: extraceptivo, proprioceptivo e intraceptivo.
El fenómeno extraceptivo (ó exteroceptivo). Las zonas de éste fenómeno pueden manifestarse con presión local sobre la piel, abultamiento, «carne de gallina» en algún lugar de la piel, manchas, pigmentación ó descamación. A veces estas zonas se manifiestan por algún tipo de descomposición vasomotora, alteración en la secreción de sudor, rubefacción, palidez en parte de la piel, etc. Se observa también al desplazar los electrodos del aparato DENS por la piel al producir una especie de «parón ó pegadura». Esto significa que aparece un cambio de impedancia en la piel.
El fenómeno proprioceptivo. Zonas de éste fenómeno se manifiestan por condensación de la piel en diversas localizaciones en forma y tamaño (varios milímetros ó centímetros). Dolor local de distinta intensidad por tensión ó presión puede molestar al paciente al moverse o palpar. En algunos casos el dolor aparece de forma espontánea y priva al paciente de capacidad de trabajo. A veces el dolor es tan fuerte que lleva a la restricción ó pérdida de alguna función de órgano ó parte del cuerpo. Las zonas trigger en los tejidos conjuntivos están acompañadas con la formación de endurecimiento local de fascia, tendones, periostio, etc. Una zona trigger fascial se distingue de la de músculo por una considerable condensación (que no desaparece después del relajamiento muscular) y localización singular que no corresponde a hacecillos de músculos y no coincide con el lugar de la contractura.
El fenómeno intraceptivo. El descubrimiento de las zonas trigger con el fenómeno intraceptivo es dificultoso. Estas zonas se manifiestan con frecuencia en forma visceral cutánea y visceral motora, es decir, zonas cutáneas, musculares, faciales y zonas Zakharin - Head (G.A.Zakharin, 1889; H.Head, 1893). Por el grado de manifestaciones clínicas las zonas trigger se dividen en activas y latentes.
Entre otras, las zonas de regulación de status hormonal, son:
Zonas antialérgicas:
Zonas de regulación de la presión arterial, intracraneal, etc. con enfermedades de los sistemas nerviosos y cardiovasculares:
Zonas inmunomoduladoras, son:
Para aumentar la eficacia y ampliar las posibilidades de la Terapia DENS es posible incorporar a cada receta individual de tratamiento la influencia en otros puntos y zonas energéticos. Algunas de estos sistemas complementarios son conocidas desde hace mucho tiempo y reconocidos por la comunidad médica y científica, otros son nuevas técnicas ampliamente experimentadas. Estos sistemas se dividen en maxi (cuerpo, cara, cabeza), midi (pies, manos, órganos sexuales) y míni (acupuntura auricular, nasal, oral).
Los puntos básicos de reanimación se encuentran en la cara.
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